Nos gusta ir con todo, pero todo de verdad: nuestros proyectos, conceptos con los que trabajamos, iniciativas propias, entorno local, identidad territorial… Aquí vaciamos nuestras mentes. Pasen y lean.
HablemosEmpieza el nuevo curso y ¡BOOM! A tu bandeja de correo han llegado unos 13 emails – a los que te has suscrito, culpa tuya – con los informes, análisis, previsiones y vaticinios de y para las redes sociales en el año anterior y el año futuro. Todo un acto de buena fe y voluntariedad que, vamos a ser sinceras, se va al carajo cuando empiezas a leer. ¿Y por qué? Pues porque nadie puede seguirle el ritmo al algoritmo de las redes sociales. Entre lo que cambia, las exigencias que tiene, los caprichos y los devaneos, los social media workers perdemos una media de 4 años de vida con cada informe anual que recibimos. Ya te lo contamos en nuestro Social Sh*t Calendar, pero de eso ya hace casi un año y hemos empezado otra vez.
Y es que, entremos al trapo directamente: ¿qué ha pasado este año con las redes sociales? Ya hemos hablado contigo lo de los cambios de Meta y la lata que dan, pero es que hay para más. Todo lo que vas a leer a continuación es nuestra interpretación del estudio que Metricool nos ha enviado sobre Instagram, y que ha causado furor en el grupo de Whatsapp del departamento de Comunicación. Ojo.
Que sí, que es así: el alcance de las publicaciones y las stories es cada vez menos, y menos, y menos. Este año, se ha reducido casi un 8% en las stories y más de 22% en las publicaciones normales. ¡Qué bien! ¡Gracias, querido algoritmo!
Y es que el promedio de alcance de los posts en una cuenta con menos de 500 seguidores es del 77%, y tú dirás que estamos exagerando cuando decimos que el alcance es bajo. Pero es que si tu cuenta tiene entre 500 y 2.000 – que tampoco es que seas una cosa loca de grande – tu alcance va a bajar hasta el 27%, y continúa bajando poquito a poco conforme subimos de escalón de número de seguidores. ¿Y por qué? Porque sí, porque lo dice el algoritmo de las redes sociales.
O sea: te pegas la vida planificando cosas para aumentar tu comunidad, y cuando llega la hora de la verdad tener más seguidores va a dañar tu alcance de una manera espectacular. Todo bien, ¿eh?
La primera vez que vas a escuchar esta palabra en tu vida. REELS. Impactante, ¿verdad?
Y es que maldita sea la hora en que Tik Tok no se dejó comprar por Instagram. Luego, claro, vinieron introduciendo los reels – una copia parecida, pero no igual – en la app de fotos por antonomasia, primero separados de los vídeos en su propia pestañita, y ahora como única manera de publicar vídeos en el muro sí o sí. A menos que hagas la trampa con un carrusel. Seguro que pronto nos cortan el rollo también con eso. Estoy divagando.
Pero eh, tranqui, que los reels tienen un alcance tremendo. Basto y vasto. Brutal. “Claro es que el vídeo es lo que busca la gente ahora” Si, no es porque el algoritmo juegue con tu vida y tus ilusiones, qué va, es lo que la gente quiere. Y un huevo.
Eso sí: volvemos a lo de antes. Si tienes menos de 500 seguidores, tus reels alcanzan a más del 800% de seguidores. Pero si tienes entre 2 y 10 K, solo al 76% Excuse me?
De nuevo, ¡gracias, querido algoritmo de redes sociales!
Por aquí somos de la opinión de que más vale poco y activo, que mucho y bots en lo que a comunidades en redes sociales se refiere. Pero claro, el escalofriante hecho de que engagement e interacciones van de la mano nos resulta bastante preocupante.
En 2022 los reyes de la interacción (no contamos con los Reels) han sido los carruseles, seguidos de las imágenes sencillas y muy, muy de lejos, los vídeos. Los carruseles están teniendo un alcance un 25% superior a las imágenes únicas, y en consecuencia también aumentan las interacciones. Lo que quiere decir que a la gente le gusta pasar pantalla como si de un libro se tratara en vez de recibir toda la información del tirón. Te damos permiso para usar esto la próxima vez que alguien te pida que pongas todos, todos, todos los datos en el primer scroll. Y también para culpar al algoritmo de las redes sociales por cualquier cosa mala que te pase.
Nos están poniendo en una tesitura en la que solo vas a poder alcanzar al 100% de tu comunidad si pagas por ello. Es la versión premium de las redes sociales: tenemos el alcance capado, limitado a menos que paguemos. Money makes the world go round.
Así que sí: si te preguntas que por qué tienes tantos seguidores y tan pocas interacciones, o nadie se entera de tus posts se debe básicamente a que el señor Facebook te está obligando sí o sí a que pagues si quieres tener el alcance y las interacciones que se esperan de tu cuenta. Promocionas cada publicación del muro para impactar a las personas que ya han demostrado un interés por ti. Sip.
¿Quién sabe? Porque las cuentas entre 50K y 1 millón tienen una media de publicación de 11 posts, 41 stories y 2 o 3 reels a la semana y tienen un alcance del 19% en el caso del muro, 64% si hablamos de los reels. Un porcentaje muy, muy por debajo de la cifra que te hemos dado para las cuentas más pequeñas que publican 3 posts, 4 stories y 1 reel o menos a la semana. Y ahora ¿qué?
Y ahora viene la nata montada encima de las fresas: los mejores momentos para publicar. La mejor hora es a partir de las 8 de la tarde, y los mejores días son el sábado y el domingo. ¿Cómo se te queda el cuerpo?
Es decir: cuando tu tienda está a punto de cerrar, cuando no hay nadie en tu local para atender, cuando la gente busca su momento de ocio, cuando es probable que no haya nadie a la escucha al otro lado de la pantalla para resolver ninguna duda, ahí. Ahí es donde le tienes que invadir bien de publicaciones, reels y de todo para tener el máximo alcance posible que, por supuesto, nunca será el 100% de las personas que, como seguidoras que son, se interesan por tu marca.
Pues sí, lo siento. No quiero desilusionarte, ni tampoco aguarte la fiesta. Prefiero que sepas lo que hay antes de que te crees falsas expectativas. Me confirmo y me reafirmo en que las empresas, los servicios, los proyectos y las iniciativas deben y tienen que estar en redes sociales porque es la forma que hemos encontrado de comunicarnos de manera directa, divertida, ágil, sencilla, adaptable. Y porque es donde está todo Dios, que hasta él tiene un perfil.
Pero no vale hacernos castillos en el aire, y empezar a montarnos un cuento en el que te vas a forrar solo con poner un post de tu nueva camiseta en el muro. ¡Ojalá! Las redes sociales están cambiando y nuestro deber es saberlo, acoplar la estrategia y la inversión de forma eficiente y avanzar con ellas. Es un ejercicio de paciencia y empatía, de acoplamiento que en Factor ñ nos conocemos bastante bien después de los casi 20 años que llevamos en esto.